Conoce las tradiciones navideñas más sorprendentes de todo el mundo
Lo que inició como una celebración cristiana hoy trasciende las fronteras religiosas. Si bien aún se celebra según los cánones del Cristianismo, también muchas culturas de otras confesiones (o de ninguna) han hecho sus aportes a esta celebración en el transcurso de los siglos. Así, las celebraciones navideñas conjugan un sincretismo que puede llegar a sorprendernos. En esta entrada te mostraremos algunas de las tradiciones navideñas más inusuales del mundo.
El gato de Navidad | Islandia
La Navidad siempre ha estado asociada a diversos animales como las ovejas, el asno y el buey del tradicional Belén. Con el tiempo, los renos también reclamaron su lugar en esta celebración. Pero, ¡un gato!
Pues sí, en Islandia una leyenda cuenta que un gato gigantesco se pasea por los gélidos campos en Navidad. Antaño, los agricultores islandeses utilizaban esta figura del imaginario popular para incentivar a sus trabajadores. De tal suerte que quienes se habían esforzado durante todo el año eran premiados con una muda de ropa nueva. Mientras que quienes habían holgazaneado debían esperar ser devorados por esta mítica criatura.
Es así como actualmente los islandeses tienen por costumbre hacerse ropa nueva para esta época del año. Con ello, creen evitar una desagradable muerte. Y quizás esto haya influido en su bien ganada fama de adictos al trabajo. ¿Tú qué opinas?
El Tió de Nadal o Tizón de Navidad | España
Todos los turistas que llegan a la región de Cataluña por el Aeropuerto Barcelona-El Prat en Navidad se sorprenden con esta historia. La tradicional actividad consiste en seleccionar un tronco o rama gruesa al inicio del Adviento. Hecho esto, se le deja comida cada noche para después ser cubierto con una manta, lo que le evitaría el frío. Esto se repite hasta la Nochebuena, cuando los más chicos de la casa lo golpean con palos mientras entonan canciones propias de la celebración.
¡La idea es que el tronco defeque regalos! Algo que, al parecer, hace de buena gana, ya que el extremo que queda fuera de la manta suele ser decorado con una “carita feliz”.
Brujas voladoras | Noruega
Los noruegos no se quedan atrás en cuanto a tradiciones navideñas extravagantes. Así es que en víspera de Navidad suelen esconder las escobas para evitar que las brujas salgan de paseo.
Sucede que la tradición señala que este es el día en que las brujas y los espíritus traviesos salen salir a divertirse a lo grande por los cielos. De tal manera, que esta pintoresca celebración busca aguarles la fiesta a las temidas hechiceras, dejándolas en tierra.
El Olentzero | España
Y regresamos a España por el Aeropuerto de Bilbao para presentarte una de las celebraciones más originales del País Vasco. Se trata del Olentzero, un personaje mitológico que ha estado en la cultura popular de esta región desde antes de su cristianización. Sin embargo, con el paso del tiempo se la asoció a la celebración de la Navidad.
Según se cree, el Olentzero es un viejo carbonero que baja de la montaña en Nochebuena con regalos para los niños. Se lo representa como un viejo bonachón, manchado de carbón y desharrapado.
Papá Noel malo | Austria
Si algo suena estrambótico es la idea de un Papá Noel malo, pero es precisamente lo que se celebra en Austria. En todo el mundo hay varias versiones del mítico personaje de larga y blanca barba. San Nicolás, Santa Claus y Papá Noel son solo algunas de ellas. Pero, en todo caso, siempre se trata de un viejo muy bondadoso que trae juguetes a los niños.
Krampus es el nombre de este terrorífico personaje que, según los austriacos, suele acompañar a Papá Noel. El caso es que los niños que se han portado bien reciben los regalos del viejo bonachón. Pero los que se han portado mal son castigados por el fabuloso personaje. Según la leyenda, Krampus no solo puede quitarle a los chiquillos sus juguetes, sino que también puede secuestrarlos ¡y hasta comérselos!
El folclore de la región alpina lo describe como una criatura mitad humano y mitad cabra. La fecha de su celebración es el 5 de diciembre. No obstante, durante todo este mes los austriacos disfrutan asustando tanto a niños como adultos con máscaras macabras por las calles del país.
Se cree que esta criatura tiene sus orígenes en las tradiciones paganas teutonas. Pero hoy se ha extendido a varios países europeos con algunas diferencias particulares. Incluso, existe un desfile anual de Krampus en Viena, Austria, además de festivales alusivos en otros países, como República Checa.
Como ves, la magia de la Navidad también da para historias inusuales que rayan en lo sorprendente. En cualquier caso, son igualmente una buena oportunidad para disfrutar de la riqueza cultural europea.
